Decenas de vuelos nacionales e internacionales fueron suspendidos este jueves en los aeropuertos de Argentina, Chile y Uruguay a causa de la presencia en la atmósfera de cenizas del cordón volcánico chilenoCaulle-Puyehue.
En Argentina, la llegada de una nueva nube de material volcánicoobligó a las aerolíneas a cancelar la actividad en el aeroparque metropolitano Jorge Newbery y el aeropuerto internacional de Ezeiza.
Las empresas, que también postergaron decenas de vuelos entre la noche del lunes y el martes, justificaron la medida por el arribo de una nube más densa de cenizas a Buenos Aires y sus suburbios.
Varios aeropuertos del sur del país permanecen además inactivos desde la erupción del cordón Caulle-Puyehue el sábado pasado, que dejó a varias localidades cubiertas de cenizas y piedras volcánicas, entre ellas las cordilleranas Villa La Angostura y San Carlos de Bariloche.
En Chile, la aerolínea LAN comunicó este jueves que volvió a suspender vuelos en Chile, Argentina y Uruguay, producto del desplazamiento de la nube de cenizas que llegó incluso a Brasil.
La empresa especificó que la medida afectó a vuelos entre Santiago de Chile y ciudades argentinas como Bariloche, Neuquén, Comodoro Rivadavia, Río Gallegos, Mendoza, Bahía Blanca, Buenos Aires y Córdoba, además de la capital uruguaya, Montevideo.
Pese a la suspensión de actividad aérea, varias localidades intentaronrecuperar su vida normal en Argentina y Chile, país donde las autoridades auguraron que la erupción podría acabar en 10 días.
En el balneario argentino de Bariloche, por ejemplo, comenzó a volver a la normalidad con el restablecimiento de las clases escolares y el funcionamiento de la administración pública.
Los fuertes vientos que azotan la región patagónica agravaron sin embargo la situación en varios puntos del sur argentino, donde las carreteras se volvieron intransitables por la falta de visibilidad, lo que impide que llegue ayuda.
Por lo mismo, las autoridades argentinas mantienen la emergencia agropecuaria, provocada por el hecho que las cenizas cubrieron los pastizales donde se alimentan los animales.
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